Pussy Riot

Ayer estaba un poco triste, le dije a mis amigos que seguro que es una mezcla entre el contexto exterior y las hormonas (como la hora le llega al reloj a mí me llega la tristeza en días específicos de mis ciclos). 

Marco y yo hablábamos de cómo nos sentimos en esa situación de tristeza por cosas que hemos vivido a la par (y no contaré porque #confidencialidad), tenemos "flujos emocionales" similares, tendencia a pensar cosas de nosotros y después viene como una agresividad interna bien cabrona que se opone a esos pensamientos pesimistas internos, él me está enseñando a que podemos canalizarlo no solo en escribir sino trasladarnos a la música. Así que decidimos tomarnos una dosis de una medicina muy especial: pusimos un documental de Pussy Riot. 

Yo no lo había visto pero es una recarga de pila muy fuerte, me siento muy reflejada en mucho de las actitudes y pensamientos de estas mujeres. A veces me duele alejarme de algunas personas, tienen demasiado miedo de mi, lo cual es gracioso porque soy una tiny baby de 1.50 y aún así la gente me tiene miedo, dicen que "intimido", a veces ese miedo se transforma en odio y ese odio suele tomar forma en violencia... meh..

A las pussy riot del mundo nos dicen que somos el diablo, unas locas, que se nos debe castigar, se atreven a decirnos intolerantes/intransigentes, que somos "cerradas" de mente, cínicas, pecadoras (mi favorito), asesinas aborteras, feminazis, blasfemas, provocativas, malas, se nos criminaliza bajo cargos completamente inventados mientras se permiten millones de otros crímenes y se deja libre a agresores, violadores, banqueros, etc., se inventan diagnósticos psiquiátricos que nos definan como enfermas para poder encerrarnos, se nos amenaza de muerte, a veces sí cumplen. 

Somos fieras salvajes, incontrolables, peligrosas, brujas, porque pensamos por nosotras, nos salimos de esa trampa  de que la política se resume en derecha vs izquierda, alteramos "el orden" y "la paz" social, aprendimos a entender nuestro valor y por eso resistimos fuertes, no somos perfectas ni como individuos ni como movimiento, somos más diversas que perfectas, somos un camino que ha salvado vidas, que preserva nuestra dignidad, reactiva el poder interno de las mujeres y todo ser que exprese feminidad en sus actos de existencia, nos da la confianza para explorar nuestra humanidad desde un autoestima más elevada, es un espacio que nos tiene el alma alimentada y en proceso de sanar constantemente, gritamos nuestra verdad, resuena en todo el mundo, aunque nos condicionen el respeto y el amor no nos rendimos, vivimos la constante batalla de mantenernos en libertad.

2020